viernes, 21 de julio de 2017

La libre elección de hospital reduce las listas de espera y mejora la sostenibilidad del sistema sanitario




Vale, es un chiste y puede llegar a provocarnos hasta gracia la situación. ¿Nos lo imaginamos de otra manera? Lo triste es que no. Lo cierto es que se deberían buscar soluciones para que eso no pasase, ni diese lugar a un chiste. Por aquí hemos hablado ya del problema de las listas de espera y de que el tiempo de espera de las mismas se haya ampliado tanto (no al nivel del chiste, pero la variable tiempo en el tema salud no se lleva bien), incluso de cómo afecta a la sostenibilidad del SNS y lo que supone no valorar un modelo mixto, por empecinamiento político, como alternativa a corregir de alguna manera esa variable tiempo.

Se apunta, en varias noticias que han aparecido durante la semana, que aquellas comunidades autónomas donde los ciudadanos y pacientes tienen libre elección para elegir centro sanitario, ven muy reducidas las listas de espera quirúrgicas. Como explica Jesús Sánchez Lambas, vicepresidente ejecutivo del Instituto Coordenadas:
“Es significativo que, en aquellas comunidades en las que los pacientes pueden seleccionar libremente hospital público para una intervención quirúrgica, como es el caso de País Vasco, Madrid o Andalucía, las listas de espera quirúrgicas están muy por debajo de la media nacional. Desde el Instituto consideramos decisivo el impacto de la libre elección sobre las listas de espera, ya que posibilitan mejores tiempos de respuesta a los usuarios”

Es decir, existe una correlación que permite mejorar la sostenibilidad del sistema sanitario (y tenemos claro que eso es lo mejor que puede pasar).

Dado que los datos parecen demostrarlo, sobre todo si se comparan las cifras de pacientes esperando en las listas de espera en Cataluña, sin libre elección, y Madrid, con libre elección, conviene tener en cuenta esta opción. Pero claro, si tenemos tantos sistemas sanitarios como comunidades autónomas y el sistema nacional de salud no impone o regula, nos seguiremos topando con la misma piedra en el camino. Y lo importante, no lo olvidemos, es la sostenibilidad... sin ella difícilmente mantendremos una sanidad universal.

Foto | 20 minutos

lunes, 10 de julio de 2017

El problema real de la Sanidad es la sostenibilidad, pero aún no lo vemos


La situación de la Sanidad es el quinto problema que más preocupa a los españoles (10,3 %), lejos del paro (71,2 %), la corrupción (49,1 %), los problemas económicos (21,7 %) y la clase política (20,9 % de entrevistados), según la encuesta realizada para el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de junio. Respecto a los problemas personales que afectan a los encuestados, la Sanidad va seguida de los problemas sociales, la educación y los relacionados con la calidad del empleo.

Las respuestas a la encuesta son espontáneas, y quizás ahí radique el hecho de que otros problemas aparezcan antes entre las prioridades de la gente: están más presentes en el día a día. Aun así, a nivel personal, el tema de la Sanidad importa mucho. Y no es para menos si pensamos en la cronicidad como uno de los principales desafíos en Medicina hoy en día (junto a los avances tecnológicos), en las listas de espera y los efectos que tienen para la salud que éstas sean tan largas, los recortes sanitarios y como se ve afectada la sostenibilidad del sistema... Todos ellos problemas que poco a poco tienen que ir preocupándonos cada vez más, no lo olvidemos.

Y esa preocupación debe elevarse a las personas encargadas de tomar las decisiones, cómo van a dar solución a esos problemas. La cronicidad, las listas de espera, la sostenibilidad del sistema no es algo que esté todos los días presentes en la prensa, pero desgraciadamente uno no es consciente de cómo está la cosa hasta que le toca vivir en primera persona la situación real del sistema sanitario.

Esperemos que los políticos no se queden en que se trata solo del quinto problema y piensen que es un problema tan importante como los que tiene por delante. Además muy real. Y no para de empeorar por no dar soluciones que ya están disponibles. Convendría dejar las discusiones entre si es mejor lo público o lo privado, y pasar a lo principal: tener un sistema sanitario sostenible en el futuro.